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No todos los bancos son iguales. Ni todos los banqueros actúan de la misma manera. Quienes conocen a Rodolfo Medina, un joven de 42 años, CEO de Second Federal, saben bien que su misión siempre ha sido apoyar a la comunidad hispana.

Desde hace años, todos los días, llega a su oficina en La Villita preguntándose: “¿a quién puedo ayudar hoy?”.

Con esa filosofía solidaria ha consolidado un negocio rentable, que da el ejemplo en estos tiempos de crisis. Second Federal es una de las instituciones financieras que más ayuda ofrece a las más pequeñas empresas hispanas de Chicago afectadas por el descalabro económico a causa del Covid-19.

Medina ha trabajado hasta la madrugada, enviando correos con información importante a pequeñas empresas que la IHCC le acercó. Esa alianza estratégica terminó siendo un salvavidas para muchos micro negocios.

El trabajo en conjunto entre la IHCC y el Second Federal también demostró que es posible dar resultados rápidos.

Decenas de pequeños negocios hispanos en La Villita y otras comunidades de Illinois tuvieron acceso a asesoría y capital.

Conozco bien a Rodolfo Medina hace muchos años. Siempre está dispuesto a ayudar a nuestra comunidad. Recibimos muchas llamadas de pequeñas empresas que están atravesando esta crisis y hemos encontrado en el Second Federal a otro socio extraordinario, que se preocupa por recibirlos, escucharlos y entender su situación. Se preocupan por los más necesitados y eso es motivo de orgullo para nosotros, dice Jaime di Paulo, Presidente & CEO de la Cámara de Comercio Hispana de Illinois (IHCC).

El Round 2 del PPP ha permitido que instituciones de crédito más pequeñas puedan procesar una mayor cantidad de solicitudes de fondos federales para sus clientes e incluso para quienes no lo son.

Second Federal está actuando a la altura de las circunstancias que atravesamos y ha dispuesto a su equipo a colaborar en todo lo que sea necesario con la IHCC para que la mayor cantidad de pequeñas empresas puedan acceder a sus servicios.

Un rápido aprendizaje

Cuando el Congreso aprobó la primera ronda de ayuda, la mayoría de los prestamistas no recibieron instrucciones precisas de la SBA.

Hubo muchas contradicciones, confusión y el sistema parecía estar diseñado para que sólo los bancos grandes pudieran procesar las ayudas para sus clientes más importantes.

“Al principio, para los más pequeños, parecía que nos pedían construir un avión mientras volaba. Fue un comienzo inestable”, asegura Medina.

La demanda superó la expectativa. Se desató la locura de llamadas, pero al principio no pudieron procesarse demasiadas solicitudes porque las empresas de 1 a 10 empleados no podían moverse a la misma velocidad que las empresas con 300 o 500 empleados, que tenían contadores, abogados y grandes bancos ayudándolos.

La primera ronda de préstamos de PPP fue un proceso de aprendizaje para Second Federal. Y el dinero se terminó el 14 de abril.

Garantizando soluciones

Para el segundo round estaban más preparados: lograron concretar más de mil aplicaciones y se ha brindado un servicio eficiente a empresas muy pequeñas que necesitaban estos préstamos para sobrevivir.

Medina ordenó cerrar temporalmente el área de préstamos comerciales y casi 30 personas en Chicago se enfocaron exclusivamente a dar atención a las microempresas.

Mientras unos procesaban las solicitudes, otros ayudaban a que los papeles de cada cliente estuvieran en regla y otros se encargaban de cerrar el proceso con el sistema establecido por la SBA.

El 99% de las solicitudes procesadas fueron para ayudar a negocios con 1 a 3 empleados.

Además, Second Federal se enorgullece de haber apoyado a múltiples organizaciones sin fines de lucro. Esa ayuda, con sentido social, permitirá que puedan seguir dando servicios a las comunidades más necesitadas.

El 80% de los créditos de Second Federal fueron concedidos a negocios y organizaciones hispanas, por un volumen que promedia los 20 mil dólares. Hubo algunos casos de créditos que superaron el millón de dólares.

Juntos somos más fuertes

Medina destacó que la IHCC ha sido un aliado invaluable, porque es una organización que tiene la conexión con múltiples empresas que realmente necesitaban estos créditos.

La IHCC trabaja muy de cerca con todos los negocios y saben quien lo necesitan. Nos ayudaron mucho a preparar a los empresarios para que el proceso de las aplicaciones fuera más rápido, dijo Medina.

Second Federal reconoció que sin ayuda de organizaciones como la IHCC no podrían haber logrado el enorme número de aplicaciones procesadas.

Una historia de solidaridad

Second Federal, ubicado en el corazón de La Villita comenzó a proporcionar servicios bancarios a inmigrantes hace 140 años.

Cuando la población europea dejó el barrio y llegaron los latinos, muchos bancos se fueron. Second Federal se quedó y ayudó a los nuevos clientes a prosperar.

Esta es la historia de la capacidad de recuperación de esta comunidad y la notable confianza que es el legado de Second Federal.

“Rudy”, el amigo de todos

Medina, nació y creció en Little Village, pero pasó su adolescencia en México. Su carrera inició trabajando en una sucursal de TCF Bank que estaba ubicado dentro de una tienda Jewel Foods, en el norte de Chicago.

Hace 12 años se unió a Second Federal. Primero fue gerente de su principal sucursal. Hoy es el presidente de una institución que ganó nueva vida hace algunos años, luego de la crisis que afectó a la industria en 2007, como parte de una red de cooperativas de crédito enfocadas en servir a comunidades de bajos ingresos.

De hecho, Second Federal ve su pequeño tamaño como una oportunidad para concretar su misión de servir a la comunidad, especialmente enfocándose en un mercado que no está atendido.

Franco, transparente y directo, como todos los oriundos de Chihuahua (México), Medina aclara que el Second Federal es un banco para quienes no pueden obtener préstamo en los bancos tradicionales debido a su historial de crédito.

“Muchos hispanos tienen problemas en su crédito, pero no por irresponsabilidad, sino porque han sido afectados por crisis económicas que no dependen de ellos. Nosotros somos comprensivos de cada situación y sabemos diferenciar bien a quien lo merece y necesita”, asegura Medina.

Educar para concretar sueños

Sin ayuda del Second Federal miles de familias hispanas no habrían concretado el sueño de comprar su primera casa.

Como cooperativa de crédito también satisfacen las necesidades de la comunidad mediante préstamos para automóviles y para cubrir las altas tarifas que pagan los inmigrantes cuando solicitan adherirse al Programa (Deferred Action for Childhood Arrivals) o para iniciar sus procesos de residencia, todos muy costosos.

Medina insiste en que todo su equipo trabaja mucho en educar a los clientes para ayudarlos a hacer realidad sus sueños y evitar que sean víctimas de quienes se aprovechan de que no entienden bien lo que dicen algunos documentos.

“Ayudar es la esencia de nuestro negocio. Un cliente que siente que le abren las puertas, cuando en muchos lugares los rechazan, va a cuidar su crédito y eso nos beneficia a todos”.

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